miércoles, 28 de octubre de 2009

Un corazón...


Un corazón que fue lastimado, no por amor, no por odio,
Sino por temor; temor a ser lastimado.

Un corazón que tiene miedo, pero que desea ser y hacer feliz;
Y sólo sabe que lo será a tu lado.

Un corazón que ya no me pertenece, que ya no me obedece,
Que ya no palpita por mí; es tuyo, siempre lo será.

Un corazón que desea una nueva vida, que desea su complementación,
Una fusión de sentimientos, aquella calidez que es la energía celestial de la vida.

Un corazón cansado, débil, que necesita no apoyo;
necesita alguien que lo acepte, que no mire de donde viene,
que lo cuide y que lo ame, aceptando todo lo que el le pueda dar.

Un corazón sumergido en otro tiempo, en otro lugar, que ya no
pertenece a una vida, sino a dos.

Un corazón que solo emana calidez, deseos de vivir, de sentir, de amar; pero de vivir por ti, de sentirte, de amarte.

Un corazón que dio, da y dará todo por un cuerpo, un alma y un corazón
Que lo desee, que lo necesite, que lo ame y que el ame.

Un corazón que lloró por ti, que sobrevive por ti, que te ama,
Que te amará y que por ti, lo que sea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario